"Cuando los demonios de la confusión y la sensación de estar invadidos nos atacan, a veces es posible aventarlos ordenando el lugar. Si se siente realmente perturbado, pruebe esto: despeje totalmente la mesa de trabajo. Pula la superficie. Llene de agua un sencillo vaso de vidrio y póngalo sobre la mesa. Y luego simplemente sientese allí y contemple el vaso de agua. El agua será el modelo de la tranquilidad y la claridad de la mente. A partir de una mente clara, las manos y el cuerpo comienzan a moverse simples y fuertes."
Stephen Nachmanovitch, Free play. La improvisación en la vida y en el arte.
Comments